Cuando voy conduciendo, juego a pensar cúal es la burrada más grande que pueden hacer los coches que llevo alrededor y cómo reaccionaría si la hicieran.
Para introducir, y como muchos padecemos, en la carretera, nos podemos encontrar con una fauna muy variada, entre la que destacaría:
Para introducir, y como muchos padecemos, en la carretera, nos podemos encontrar con una fauna muy variada, entre la que destacaría:
- Los impacientes: que te acosan incesantemente hasta que te adelantan para encontrarse en la misma situación con otro coche que va a tu misma velocidad 10 metros mas adelante .Yo los llamo... "los prisas". Cuando van detrás de tí pisándote los talones en una autovía o autopista y tardas un poco en dejarles pasar, retirándote al carril de la derecha, se ponen muy nerviosos, actúan de forma extraña, sacan el intermitente (como indicándote que se van a meter en la mediana), pitan, te hacen luces,... . Lo mejor, es siempre dejarles pasar.
- Los primeros: que por narices han de pasar antes en cualquier rotonda, intersección o incorporación (éstos ven muchas carreras de Fórmula 1 en la tele).
- Los listos (typical spanish): que se saltan colas de coches y se cuelan ante el más mínimo descuido. A esta especie he aprendido a ignorarla. Cuando se me colocan en paralelo para colarse, suelen actuar como si no hubieran visto la cola, así que yo me comporto como si no los hubiera visto a ellos. El otro día uno me pitó cuando descaradamente estaba invadiendo mi carril... ¿Es que no me has visto? gesticulaba... yo pasé primero ignorándolo y me dije "si que te había visto, pero... no te quería ver".
- Los que llevan de adorno los intermitentes: de estos te puedes esperar un cambio de carril en cualquier momento. Para ellos... es evidente que el resto de los conductores conocen perfectamente su próxima maniobra, así que... ¿porqué indicarla?.
- Los que activan el intermitente al mismo tiempo que giran el volante: lo que les da derecho a invadir tu carril instantáneamente, sin ni siquiera esperar un tiempo prudencial. Cuidado con éstos. No se te ocurra pitarles ya que encima te dirán "¿es que no me has visto poner el intermitente?". Cuando fueron a la autoescuela aprendieron la lección del cambio de carril, pero a medias.
- Los de las motos zigzageantes, pizzeros y demás locos a dos ruedas: conocidos porque viéndolos en acción ya te asustan. El concepto izquierda y derecha quedó olvidado en barrio sesamo, aquí todo vale. Sobre éstos, mejor tenerlos cerca el menor tiempo posible, de esta forma disminuiremos la probabilidad de incidente.
En fín, ¡Qué os voy a contar! ...
[ Abrid camino!. Nuevo conductor en la carretera! Foto de: Jill Greenseth]
A través de esta extraña afición que os comentaba al principio, he conseguido no inmutarme cuando un coche se me cruza, para inesperadamente, invade mi carril, etc, etc. Muchas veces ni siquiera les pito y me digo para mis adentros "Lo sabía".
El viernes pasado, volviendo del trabajo un coche se incorporaba a una calle por la que yo circulaba. Mi instinto "aracnido" me decía que no iba a parar, ya que se trataba de un "yo primero", pero... ¡era imposible que los dos pasaramos sin chocar!. Cuando comprobé que me había visto me dije "creo que para", pero sin mucha convicción .
¡Efectivamente!. No paró hasta que advirtió lo que yo ya había diagnosticado. Que no podía ser, que no podímos compartir ese trozo de calle sin chocarnos. Pero para cuando su instintivo "yo primero" se dió cuenta que su coche no tenía el arranque de un F1, ya estaba cruzado en medio de la calle a la que se incorporaba, y por la que yo circulaba. Frené, hice un rápido movimiento de volante y lo sorteé asombrosamente.
Después de la peripecia, no pude evitar mirar por el espejo retrovisor. El otro coche, junto con su conductor estaban allí, parados. El conductor agazapado dentro del vehículo, agarrado al volante, reflexionando sobre lo cerca que habíamos estado de chocar, asimilando que no lo habíamos hecho y esperando una tremenda pitada mía.
Como en este caso, una buena forma para no llevarse sorpresas ni decepciones es pensar siempre en lo peor que puede ocurrir, en lo más desfavorable, y prepararte para ello. Si luego no es así, pues te llevas una pequeña alegría y si es así te reafirmas en pensar de esta forma.
Hace muchos años, cuando todavía era impaciente, se me estropeó mi ZX Spectrum. Lo llevé a la tienda a que me lo repararan y desde aquí lo enviaron a Madrid. En una semana lo tendría en casa, eso fué lo que me prometieron. Así estuve unos cuantos meses, yendo puntualmente semana a semana para ver si esa semana prometida era la buena. Desde entonces ni me inmuto cuando me dicen que una compra o reparación se va a retrasar. Al fin y al cabo... era lo que esperaba.
Así que cuando alguien me dice " ¿Puedes creerte que ...? " Yo siempre respondo antes de que acabe ... Me lo creo!.
Y a tí ... ¿Te pasa lo mismo?
[@] Asombroso video YouTube "todos se cruzan y nadie choca"
A través de esta extraña afición que os comentaba al principio, he conseguido no inmutarme cuando un coche se me cruza, para inesperadamente, invade mi carril, etc, etc. Muchas veces ni siquiera les pito y me digo para mis adentros "Lo sabía".
El viernes pasado, volviendo del trabajo un coche se incorporaba a una calle por la que yo circulaba. Mi instinto "aracnido" me decía que no iba a parar, ya que se trataba de un "yo primero", pero... ¡era imposible que los dos pasaramos sin chocar!. Cuando comprobé que me había visto me dije "creo que para", pero sin mucha convicción .
¡Efectivamente!. No paró hasta que advirtió lo que yo ya había diagnosticado. Que no podía ser, que no podímos compartir ese trozo de calle sin chocarnos. Pero para cuando su instintivo "yo primero" se dió cuenta que su coche no tenía el arranque de un F1, ya estaba cruzado en medio de la calle a la que se incorporaba, y por la que yo circulaba. Frené, hice un rápido movimiento de volante y lo sorteé asombrosamente.
Después de la peripecia, no pude evitar mirar por el espejo retrovisor. El otro coche, junto con su conductor estaban allí, parados. El conductor agazapado dentro del vehículo, agarrado al volante, reflexionando sobre lo cerca que habíamos estado de chocar, asimilando que no lo habíamos hecho y esperando una tremenda pitada mía.
Como en este caso, una buena forma para no llevarse sorpresas ni decepciones es pensar siempre en lo peor que puede ocurrir, en lo más desfavorable, y prepararte para ello. Si luego no es así, pues te llevas una pequeña alegría y si es así te reafirmas en pensar de esta forma.
Hace muchos años, cuando todavía era impaciente, se me estropeó mi ZX Spectrum. Lo llevé a la tienda a que me lo repararan y desde aquí lo enviaron a Madrid. En una semana lo tendría en casa, eso fué lo que me prometieron. Así estuve unos cuantos meses, yendo puntualmente semana a semana para ver si esa semana prometida era la buena. Desde entonces ni me inmuto cuando me dicen que una compra o reparación se va a retrasar. Al fin y al cabo... era lo que esperaba.
Así que cuando alguien me dice " ¿Puedes creerte que ...? " Yo siempre respondo antes de que acabe ... Me lo creo!.
Y a tí ... ¿Te pasa lo mismo?
[@] Asombroso video YouTube "todos se cruzan y nadie choca"
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